¿Qué es la Ley 22?

  • No haber residido en Puerto Rico durante el periodo de 2006 a 2012 y no tener domicilio fiscal fuera de Puerto Rico. 
  • Residir al menos 183 días (aprox. 6 meses) del año en Puerto Rico.
  • Debe donar $10,000 al año a organizaciones sin fines de lucro en Puerto Rico.
  • Debe comprar una casa en Puerto Rico durante los primeros dos años de obtener el decreto.

1. Falta de Transparencia

A pesar de que se supone que esta información sea pública, la misma aún no está disponible a la comunidad general o la prensa. Nuestra coalición ha hecho varios pedidos de información al DDEC entre 2023 y 2024, los cuales aún no han sido contestados. 

El Departamento de Desarrollo Económico (DDEC)  “no puede” fiscalizar 

La propia agencia a cargo de otorgar y fiscalizar los decretos ha indicado que no cuenta con las herramientas necesarias para  fiscalizar el cumplimiento con los decretos otorgados bajo la Ley 22. No hubo fiscalización alguna durante los primeros ocho años luego de la aprobación de la ley, creando un vacío informativo sobre el uso apropiado y los beneficios o deficiencias del programa. 

¿A quién protege el DDEC?

Con su falta de transparencia y afán por esconder información sobre los inversionistas individuales, el DDEC protege y beneficia a personas que advienen ingresos personales o de sus compañías de manera fraudulenta o ilegal. Desde el comienzo de la Ley 22 al día de hoy, inversionistas individuales han sido acusados de fraude corporativo y gubernamental, lavado de dinero, estafa, malversación de fondos, fraude de inversiones, entre otros crímenes.

A pesar de que el DDEC anunció una auditoría general del cumplimiento de la Ley 22 en marzo de 2021, todavía al día de hoy no se conocen los resultados.

2. IRS y la Evasión Contributiva 

En el 2023, el IRS anunció tener bajo investigación sobre 100 personas que han estado utilizando decretos en Puerto Rico para evadir contribuciones. 

Inversionistas individuales “juegan” con el sistema en Puerto Rico

Los inversionistas individuales que usan el subterfugio de no declarar sus ingresos como provenientes de Estados Unidos se benefician de los servicios esenciales provistos por los estados y Puerto Rico sin pagar impuestos en ninguna jurisdicción.

Aún cumpliendo con la Sección 937 del IRC, el IRS piensa que los inversionistas individuales pueden estar declarando erróneamente ingresos de fuente estadounidense como ingresos de fuente de Puerto Rico para evitar pagar impuestos en los Estados Unidos. 

El Congreso de Estados Unidos en búsqueda de explicaciones

La campaña que lleva a cabo el IRS se originó cuando el Congreso solicitó al IRS en 2020 un informe sobre los incentivos fiscales de Puerto Rico debido a la preocupación ante la posibilidad de prácticas de evasión fiscal. 

A fines del 2023, una docena de congresistas enviaron una carta al IRS pidiendo explicaciones sobre su falta de fiscalización de la Ley 22. 

En el 2024, un agente anónimo dentro del IRS denunció que no se había llevado a cabo adecuadamente el proceso de auditoría de la Ley 22. En respuesta a estas denuncias, la agencia anunció que estaría asignando más agentes a este tema.

3. Impacto Económico

A pesar de tener muy poca información y transparencia sobre quiénes se benefician y cuáles son las ganancias de inversionistas individuales, los pocos datos disponibles revelan que el Pueblo de Puerto Rico pierde miles de millones de dólares por concepto de la Ley 22.

El Departamento de Hacienda dice que no puede hacer nada

Son muy escasos los datos disponibles sobre el impacto económico de los decretos otorgados y una de las razones es que el Departamento de Hacienda no tiene ni suficiente autoridad, ni se le han asignado los recursos para fiscalizar y revocar decretos

Según publicó Hacienda en junio de 2023 en su Informe de Gastos Tributarios para los Años contributivos 2020 a 2026, el Gobierno de Puerto Rico ha dejado de generar alrededor de $4,400 millones por concepto de la Ley 22. Más de cuatro mil millones perdidos en medio de una crisis fiscal donde el país sufre incertidumbre sobre la operación de servicios esenciales.

Dinero que el Gobierno de Puerto Rico ha dejado de generar por concepto de la Ley 22

El Departamento de Desarrollo Económico (DDEC) lleva años sin auditar

Desde el 2015 hasta el 2021 el DDEC no había verificado ningún informe anual radicado por los inversionistas individuales, incumpliendo con su obligación según el estatuto de auditar a las 3,311 personas acogidas a la Ley 22

El Secretario de Hacienda ha establecido que  la falta de transparencia dentro del DDEC sobre quiénes tienen decretos vigentes bajo la Ley 22 significa que Hacienda solo cuenta con un estimado de planillas que debe recibir por parte de beneficiarios de la Ley 22. Al momento, Hacienda no tiene una medida real sobre el impacto económico de los decretos sin saber quiénes son los inversionistas ni cuántos son.

El incremento en el costo de vivienda y la accesibilidad de inversionistas ha resultado en el desplazamiento de familias y comunidades y sus vínculos históricos, personales, familiares y culturales. Comunidades alrededor de todo Puerto Rico han sido trastocadas para siempre, arriesgando su continuidad e historia.

El gobierno de Puerto Rico no provee datos oficiales sobre la tendencia de los inversionistas individuales de comprar propiedades que componen barrios y comunidades. La compra de sectores enteros, acelera el desplazamiento de las comunidades al convertirlas en sectores de AirBnB o para reventa a precios más altos. 

El Municipio de Quebradillas

Puerta de Tierra, Municipio de San Juan

5. Impacto Ambiental

Las compras de propiedades y terrenos por parte de los inversionistas individuales ha tenido un impacto directo sobre el medio ambiente, en especial los terrenos en las costas del archipiélago y aquellos cerca de paisajes naturales.

Desarrollo ilegal de recursos

Esta nueva tendencia en el mercado de propiedad ha elevado repentinamente el valor de los terrenos costeros, playas y  manglares que protegen las costas de Puerto Rico, otros recursos naturales y sus ecosistemas. 

El nuevo valor de mercado de estas propiedades y terrenos y la capacidad de generar ganancias ha llevado al desarrollo de los mismos sin considerar su impacto ambiental y en muchas ocasiones de manera ilegal, ya que estos recursos le pertenecen al Pueblo.

Recientemente se han denunciado varios proyectos de inversión y desarrollo que afectan directamente el ambiente.

Proyectos denunciados